Una pregunta que me hacen muchas veces es ésta: ¿Cómo puedo superar el miedo a la crítica? ¿Cómo lo hago para que deje de importarme? ¿Por qué me afecta tanto lo que los demás piensen de mí? Bien. Hacerse estas preguntas es bueno y vengo a daros algunos consejos para sobrellevar estas situaciones de una buena manera.
Para empezar, hay que dejar claro que estos miedos son absolutamente normales. De verdad, no sabéis la de veces que me han hecho este tipo de preguntas. Es más: muchas veces, las reticencias de grandes profesionales a dar un salto con su marca personal se debe, justamente, al miedo del «qué dirán». Pero la sociedad nos ha educado así. Qué triste que nos importe más que opinan los otros que lo que pensamos nosotros mismos sobre nuestras acciones. Por todo esto, creo que no es realista pensar que podemos dejar de tener miedo a la crítica, pero sí que creo firmemente que se puede aprender a controlar este miedo.
«No podemos dejar de tener miedo a la crítica, pero sí aprender a controlar este miedo»
¿Cómo aprender a controlar el miedo a la crítica?
Para aprender a controlar el miedo a la crítica, primero uno debe IDENTIFICAR quién te está criticando, sabiendo que si esta persona no está dentro de tus AUDIENCIAS porque si nunca vas a poder gustarle, entonces esta crítica no debería importarte.
Como ya hemos mencionado en otras ocasiones, debemos tener claro que hay 3 tipos de audiencias según intereses y afinidades:
- LOS FANS: Acostumbra a ser un 30% de la gente con la que conectas. Son aquellos con quienes encuentras puntos de afinidad inmediatamente. Este grupo son los que influencian a otros con tu «qué», «cómo» y «para qué» que aplicamos con el Método RADAR de Marca Personal.
- LOS PASIVOS: Acostumbran a ser aproximadamente un 40% de las personas a las que conoces o podrías llegar a conocer, y que podrían convertirse en FAN. A estas personas hay que dedicarles tiempo y atención para que te conozcan y encontrar si existen intereses comunes que produzcan afinidad. Está en tu mano generar estas oportunidades.
- LOS CRÍTICOS: Suelen ser el 30% restante, un porcentaje que puede ser tan grande como el de los FAN. Personas con quien no encuentras puntos en común porque vuestra manera de pensar, creencias, intereses y valores son opuestos. Qué curioso resulta que, aún sabiendo esa falta de afinidad, muchas veces son los que más nos afectan. Quizás porque están más motivados que el resto por demostrar su descontento o censura a lo que eres y lo que haces, por representar exactamente lo contrario de lo que son ellos. Mi recomendación es que aprendas a no gastar tiempo ni esfuerzos intentando gustarles o buscar su aprobación, porque difícilmente la vas a encontrar. Con ellos es mejor ignora sus críticas y/o defender tu punto de vista con asertividad.
Si quieres ahondar un poco más en el tema de las audiencias, encontrarás mucha más información en el capítulo 4 de mi libro Ahora o Nunca.
Si en esas críticas hay mensajes que te preocupan porque crees que pueden tener razón, o que hay algo que se te escapa y deberías tener en cuenta respecto a tu carrera y marca personal, mi consejo es que acudas a un consultor de Marca Personal o a un orientador profesional. Nada es mejor que tener un guía para gestionar la imagen y marca que proyectas al mundo, y seguro que aprenderás más cosas sobre ti de las que piensas. Recuerda que el mejor antídoto ante los críticos es estar seguro de uno mismo, y es normal necesitar ayuda para ello.
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