historiasdecracks
historiasdecracks
Diego

Todas las personas son únicas. Individuos con unas características heredadas y también, adquiridas. Dictadas por genes y por el aprendizaje que se prende al ser humano con el devenir de la vida.

Quién diga que una persona no tiene talento se equivoca estrepitosamente. Todo el mundo sabe hacer algo único de una manera especial.

El problema es que pensamos que ese algo único tiene que estar alineado a los valores actuales o pensamos que el criterio propio, el ciegamente considerado más válido, es el único que sirve para evaluar el talento.

Nada más lejos de la realidad. Probado ha quedado en la historia de la Humanidad que las personas que piensan distinto, que se diferencian y luchan por sus creencias más allá de los cánones establecidos son las que han hecho evolucionar la sociedad.

En las empresas esas personas también existen. Algunas producen cambios sonoros y otras aportan valor en silencio, pero todas contribuyen a alcanzar los objetivos. Porque todas tienen talento.

¿Cómo detectar ese talento y darle alas para crecer?

Escuchando con la mente abierta y el corazón limpio. Sin prejuicios y dispuesto a valorar personas distintas a nosotros.

¿Cómo saber que ese talento es el que necesita nuestra compañía?

Buscando si existe un nexo entre su motivación personal y la misión de la empresa. Al identificarse con el objetivo último y prioritario sentirá ilusión por aplicar su conocimiento , disfrutará y crecerá. Innovará si es necesario porque las únicas barreras que percibirá serán las que le separen de lograr su objetivo.

¿Cómo retener el talento en las empresas?

Trabajando duro para alcanzar la misión, siendo honesto con ella. Si el profesional siente que la misión es fachada, que realmente la empresa no cree en ella, perderá su motivación y por lo tanto buscará otro lugar donde poder ilusionarse con su trabajo. Y por supuesto dejándole crecer, dándole alas para crear.

¿Debe temer la empresa la visibilidad del talento?

La razón fundamental que tienen las empresas para temer la visibilidad de sus profesionales es que la competencia los capte. ¿Todavía no saben que si alguien se quiere ir, lo hará de todas formas? ¿Qué si alguien está satisfecho en su trabajo no se moverá?. Intentar ocultar a los profesionales para no perderlos es como intentar quemar todos los husos para que la princesa no se pinche el dedo.

La visibilidad del talento proporciona valor al profesional y a la empresa en la que se integra. ¿Messi o Ronaldo no aportan valor a sus equipos? ¿No acuden más aficionados al campo a verlos? Las estrellas que brillan con luz propia atraen personas que buscan alumbrarse y disfrutar de su destello.

Todas las personas tienen un talento al igual que todas las estrellas brillan. Incluso de día, aunque no las veamos, siguen desprendiendo una extraordinaria luz. Como muchas de las personas a nuestro alrededor.

¡Hablemos!
1
¿Necesitas ayuda?
Encantada de saludarte, soy María José del equipo de Arancha Ruiz ¿En qué te podemos ayudar?