Escucho muchas veces aquello de que los jóvenes de hoy no se comprometen, que no saben lo que es el esfuerzo.
Lo decimos nosotros, los del babyboom y la generación X que las estamos pasando negras con la crisis pero que hemos llevamos años trabajando en cosas que nos han permitido tener una profesión.
Muchos piensan: «Míralos, estos jóvenes son muy blandos, lo único que piensan es en divertirse».
Pero pienso que nos equivocamos. Los jóvenes de hoy tienen talento.
Creo firmemente que tenemos que ayudarles a que sientan ilusión por el logro.
Tengo tres hijos muy pequeños y me afano en enseñarles a cuidar las cosas. Han nacido en plena crisis pero en su pequeño mundo las cosas se pueden conseguir aparentemente por muy poco valor (unos lápices, chucherías, blocs de dibujo, juguetes en McDonalds). Una falsa abundancia de plástico chino en continua reposición.
Si crecen pensando que todas las cosas son sustituibles con poco esfuerzo, el día en que tengan que hacerse cargo de algo importante no estarán preparados para ello. Su ejercicio de aprendizaje a base de prueba y error resultará caro. Ya me imagino como madre en ese momento
«¡¡¿qué has perdido la caja de rotrings?!! ¡castigado! y ahora ¡dibujarás con rotuladores del chino!
Pero ¿habrán actuado mal o el error habrá estado en la educación que les he inculcado?.
Si aplico este ejemplo a la situación de los jóvenes de hoy veo bastante parecido. No saben trabajar, pero ¿les hemos dado una oportunidad para aprender? No tienen espíritu crítico, pero ¿les hemos enseñado? No tienen la cultura del esfuerzo, pero ¿se la hemos inculcado?
El primer empleo no te convierte en un gran especialista de nada, simplemente te enseña a trabajar. El jefe es el maestro, el coach, el inspirador. La organización es la escuela, el campo de fútbol donde entrenar.
La prueba y error sale cara en un primer empleo cuando se exige a los jóvenes que sepan usar unos rotrings cuando nunca se les pidió, ni tan siquiera, que ordenaran los lápices en su cajón.
Desde el Gobierno, desde las empresas, desde la sociedad deberíamos ayudar a los jóvenes a aprender a trabajar. Esos niños ahora son adultos, pero no miremos para otro lado quejándonos de su mala educación. Enseñémosles, démosles la oportunidad que necesitan para aprender. Y tengamos claro que el aprendizaje es un proceso que lleva su tiempo. Seamos pacientes y cuando esa virtud nos falte, recordemos que también fuimos niños y que tuvimos la suerte de tener a alguien que nos enseñó a cuidar los lápices.
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* Creo que hay que fomentar más el empleo juvenil, incentivar aún más a las empresas para que incorporen jóvenes.
* Creo que los jóvenes aportan mucho valor. Su trabajo debe ser justamente remunerado.
* Creo que los jóvenes pueden enseñarnos mucho.
* Creo que los jubilados y pre-jubilados deberían ser mentores de los jóvenes. Tienen un conocimiento extraordinario y mucho que aportar. No enviemos a los mayores a casa impidiéndoles trabajar para no perder su pensión. Creemos programas para que puedan invertir su tiempo y dinero en seguir produciendo. Que se incentive la creación de empresa con jubilados y prejubilados que contraten jóvenes. ¡Qué buen mix!
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Nota del autor:Los jóvenes tienen mucho talento y saldrán adelante a pesar del momento complejo que les ha tocado vivir. Este artículo pretende argumentar rebatiendo las bases erróneas sobre las que algunos se sustentan cuando hablan de los jóvenes, bases equivocadas que para nada comparto.
Quizá el artículo resulta algo paternalista, pero pretendía hablar en un tono que llegara a los que tienen que cambiar de mentalidad, no a los que saben lo que realmente hay.
Personalmente me niego a una rendición sin lucha. Veo que hay muchas declaraciones de intenciones pero muy poca acción en una dirección concreta.
Crear una colaboración social real. No se trata de que los jóvenes salgan adelante a pesar de nadie, sino gracias al trabajo de todos.
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Me parece que partes de una posición algo errónea. Por qué supones que los jóvenes no saben trabajar, no tienen espíritu crítico ni de esfuerzo? Partiendo de esas premisas poco confias en ellos. Crees que necesitan tu «ayuda», como si carecieran de algo. A lo mejor el día de mañana te sorprenden y te dejan atrás, a lo mejor no necesitan nuestra «ayuda», a lo mejor están estudiando, trabajando en lo que pueden, aprendiendo, generando relaciones, viajando, soñando, movilizándose, y no a la sopa boba como das a entender. No son ballenas a las que hay que salvar. Recuerdo que había un grupo que era «Save Venice», cuando fui a Venecia me encontré un cartel que decía «Save Yourself», es decir, Venecia no necesita tu ayuda para que la «salves». Pues es igual, no puedes ir de salvadora de nadie, si conoces a jóvenes, respétales, mírales de igual a igual, no como si fueran niños pequeños, y te darás cuenta de que tienes mucho que aprender de ellos, mucho.
Me parece perfecto el articulo y la exposición , en mi opinión es sangrante el pensar o incluso el utilizar el termino generación perdida , es necesario que se fomente ese empleo juvenil , no solo por esa grupo de población sino por la paradoja de que en su futuro dentro del sistema de contribución a la seguridad social se encuentra directamente vinculado al futuro de otras generaciones, tema muy interesante desde mi punto de vista .
Mask, creo que los jóvenes tienen mucho talento. Cito: «Pero pienso que nos equivocamos. Los jóvenes de hoy tienen talento». Este artículo pretende hacer un llamamiento para que se les dé de una vez acceso al mundo empresarial, porque de esa manera aprenderán de nuestros errores desde dentro, y podrán llevar a la sociedad a un sitio mejor del que nosotros les hemos llevado.
De acuerdo contigo, los jóvenes y cualquier persona tiene talento. Pero parece que compartes que son «ni-ni» cuando sólo lo son un 1%. Dices que no ellos no saben en qué tienen talento, ¿en qué te basas? Que no saben dónde está la meta ¿Y dónde está la meta? Dependerá de cada uno. Que no sienten ilusión por el logro ¿Cómo sabes lo que siente un grupo de personas caracterizándoles por la edad? Que no saben trabajar ¿? Los jóvenes que yo conozco «saben» trabajar como sabía yo a su edad (había gente con más disciplina y otros tuvimos que irlo aprendiendo…). Que no tienen ni espíritu crítico ni cultura del esfuerzo ¿? Todo son afirmaciones que haces tú. Con estas afirmaciones a mí no me apetecería contratar a este tipo de joven que tú presentas.
Escribir es volcar ideas, pensamientos que van de la cabeza a los dedos. El escritor diestro es capaz de hacerlo siendo certero y transmitiendo inequívocamente las ideas que tiene. Claramente yo no he sido ese tipo de autor.
Este artículo fue fruto de la frustración que sentía al escuchar una y otra vez determinados estereotipos sobre los jóvenes y estaba destinado a rebatir esos argumentos. Ahora me doy cuenta de que no se trataba de rebatir bases erróneas, sino de aportar hechos certeros. Gracias a vuestros comentarios, «errare humanum est».
Arancha,
Tu artículo me parece muy acertado, y explicándolo sencillamente a través del ejemplo de tus hijos, creo que tiene mensajes fundamentales. Me quedo con dos frases:
«Si crecen pensando que todas las cosas son sustituibles con poco esfuerzo, el día en que tengan que hacerse cargo de algo importante no estarán preparados para ello»
«Enseñémosles, démosles la oportunidad que necesitan para aprender. Y tengamos claro que el aprendizaje es un proceso que lleva su tiempo»
Y es que nadie nace aprendido, el aprendizaje es un proceso que requiere método y muchas horas de trabajo. Cada uno nace con capacidades, la educación y el entorno deberían crear las circunstancias adecuadas para que nos desarrollemos y crezcamos, ante todo, a nivel personal (con todas las facetas que ello implica). Obviamente no es así para todo el mundo.
Si el modelo que nos han inculcado desde pequeños y hemos vivido resulta que no es el correcto, ¿tengo yo la culpa?
Creo que mucha gente joven, altamente cualificada, se siente desorientada. De hecho, no es una percepción, lo vivo en el día con el contacto directo con estos personas. Crecieron creyendo que estudiando (y contra más mejor) tendrían asegurado un puesto de trabajo, y la realidad que se están encontrando es otra muy diferente.
Soy emprendedora, y lo llevo en el ADN. De no ser así sería imposible que me dedicara a crear empresas. Estudié Economía y lo único de que me hablaban en la carrera es de qué haríamos cuando ejerciéramos funciones en una gran empresa. Mi padre, después de 15 años de carrera profesional todavía no entiende porqué no quise ser funcionaria o trabajar en un banco o gran empresa, como el resto de las personas cercanas a la familia. Ahora, por primera vez, lo entiende y se alegra de que pensara de manera distinta.
A Mask: no percibo en el post de Arancha las conclusiones que incluyes.
Hace tiempo me enviaron un correo en el que aparecian frases como los «los jovenes ya no saben lucha» «los jóvenes solo piensan en divertirse» » los jóvenes no se esfuerzan», parecían frases muy actuales , pero las habían enunciado Sócrates, Aristóteles y personajes de esas épocas… YO también soy madre de un niño y de otro que esperamos para octubre, me preocupa el «futuro» que le voy a dejar, pero creo que con un buen presente todo será más fácil. Antes se educaba para encontrar un trabajo, ahora , por suerte cada vez hay muchas iniciativas que enseñan cómo poder ser ser un emprendedor ( hasta en Iniciador tienen un programa Junior). Y tampoco se educa para desarrollar ningún talento, y hay creo que entra una gran labor como padres.
Me gusta mucho la idea de esos jubilados, pre-jubilados que podrían ser mentores de la gente, tendrían tanto que aportar¡¡
Mara, pensé que había aprobado tu comentario hace tiempo y con sorpresa descubro que no.
Hay un anuncio de un coche que juega precisamente con esa idea. Dos jóvenes que dicen («nunca seremos como nuestros padres») cuando se muestra que hacían exactamente lo mismo. La vida es un ciclo que se repite constantemente.
Gracias por compartir.
Arancha, soy participe que el mundo debe de leerte mas…
yo si apuesto por la juventud…, son los unicos capaces de hacer una revolucion en cualquier rama, ahora el kit es como animarlos a que trabajen, y que el mix entre jubilados y jovenes debe de promoverse aun mas, soy de la opinion que japon esta donde esta por esa maravillosa combinacion, y evidentemente su cultura.
Ademas por eso soy fan de la mac, creada y fundada por un emprendedor y triunfador, es una pena y una lastima para todos su perdida, pero nos llego a nuestros corazon y mente, de que siempre existe la posibilidad de pensar diferente, para cualquier cosa.
por eso simpatizo con todos aquellos emprendedores, y que son capaces de crear PYMES, Y SI SON JOVENES AUN MAS, porque el futuro es de ellos.