Hacía mucho tiempo que quería escribir de Martí.
Cuando estaba ideando el blog y pensando en quiénes serían “Los Cracks” a los que pediría participar, Martí era uno de mis elegidos. Pero curiosamente no me atreví a pedírselo directamente hasta hace relativamente poco.
Conocí a Martí hace muchos años, cuando él daba clases en el IE Law School y yo formaba parte de la Dirección. Creo que impartía derecho informático, pero realmente lo que les enseñaba era a ser abogados atípicos, cuando atípico significa creativo, vivo, despierto y agudo. Distinto.
Martí había estudiado también el Master en Asesoría Jurídica de Empresas del IE y, gracias a su brillantez, había sido fichado por Garrigues. Evolución perfecta y soñada para muchos abogados. Pero en lugar de continuar la carrera dentro del despacho decidió crear su propia compañía: Derecho.com. Lo hizo en el año 2.000, el año del cambio de milenio. Internet había dejado de ser un lugar extraño y desconocido al que se accedía con un módem con sonidos de Encuentros en la Tercera Fase. Era accesible y abría todo un mundo de oportunidades…y también de fracasos.
Pero Martí sabía lo que hacía. Derecho.com sigue siendo a día de hoy un referente en el sector y desde entonces Martí ha fundado diez empresas más.
El mundo del comercio electrónico le atrae, le divierte. Cuando nos sentamos a charlar, siempre somos como dos niños intercambiando juguetes y contando qué maravillas nuevas hemos descubierto. Eso es lo que más me gusta de Martí. Su conocimiento, su sencillez y su ilusión constante.
Recuerda que un día se dijo – “cuando sea mayor, no quiero mirar para atrás y decir “¿y si lo hubiera intentado?” – así que dejó su trabajo en una gran empresa y comenzó a emprender.
Desde entonces intenta hacer las cosas que le gustan. Por eso es emprendedor. Para tener la libertad de dedicarse a impulsar proyectos que le apasionen. La mejor señal de que lo está consiguiendo es que ni siquiera se acuerda de mirar el reloj durante el día.
Tiene además continuos hobbies, y sobre todo una familia a la que adora. Sabe que la vida son cuatro días y que es mejor pasar disfrutándola.
Es optimista por naturaleza. Le vuelve osado querer pasarlo bien y disfrutar de la vida. Le pregunté si le movía la pasión o la razón:
“Pasión para lanzar proyectos y razón para gestionar su crecimiento” – me contestó.
Las dos caras de la moneda de la vida para Martí: “la cara es la sonrisa de mis hijos y la cruz es ser consciente de nuestra fragilidad”.
Martí quería ser de pequeño astronauta. Incluso evaluó la posibilidad de ser piloto militar para así poder conducir un cohete. Sabe que algún día viajará por el espacio.
Porque en el cielo están las estrellas que en sus sueños quiere alcanzar y que en la vida toca ya.
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Martí Manent nació en Mataró.
Ha fundado 10 empresas
Ha trabajado en Garrigues Abogados
Ha sido Presidente de la Asociación Española de Comercio Electrónico
Cofundador de la European Ecommerce Conference
Ha producido series de televisión
Director de Derecho.com www.derecho.com y elAbogado.com www.elAbogado.com
Vice Presidente de aDigital.org
Vice Presidente de Confianza Online
Profesor del Instituto de Empresa
Recomiendo seguir a Martí en el Twiiter, es una fuente muy interesante. @martimanent
No puedo estar más de acuerdo contigo…desde luego Martí es un crack.
Fuí alumna suya en el MAJ de 2002 y aunque su asignatura era una de mis optativas, supo despertar mi vocación por las Nuevas Tecnologías y, en concreto por la LOPD.
Desde que acabé, siempre he trabajado en este sector y puedo darle las gracias por despertar ese interés en mí.
Cristina Palomino.
Consultora/Auditora LOPD en Helas Consultores.
Todo lo dicho dice mucho de Martí. El texto destila admiración, pero como docente, sin duda las palabras de Cristina, su alumna, son un auténtico broche.
Nuestros hijos necesitan referentes como Martí.
buen articulo, gracias
Con 20 cracks más así acabamos con el paro en este pais. Animo!!
Muy buena historia y buen ejemplo.
Anima a luchar.
Desde luego, ¡Vaya crack! Creo que el problema es que nuestro país no ofrece las suficientes oportunidades a esta clase de gente. No obstante espero que las cosas vayan cambiando poco a poco la verdad…
Un saludo.
Javier
Se necesitan muchas personas con este tipo de iniciativa e ilusión para que este país pueda «tirar» hacia delante. Tantos miles de políticos y cargos de confianza no hacen más que lastrar el impulso que necesita un gran país.