Hoy en conocido a través de una persona a la que admiro el proyecto YPD.
Young Potencial Development define su misión como
Ayudar a los jóvenes a descubrir su verdadero potencial y a desarrollar nuevas habilidades a través de las más novedosas técnicas de aprendizaje por la experiencia.
Quieren ofrecer a los jóvenes la oportunidad de conocer su potencial y de ofrecerles el acceso a herramientas claves para un mejor y más impactante desarrollo personal y profesional.
Éstas son: Liderazgo, Energía, Comunicación y Creatividad
En un momento donde el futuro se escribe con e de emprendedor me congratulo en saber que hay iniciativas que ayudan a los jóvenes a soñar, crear, convencer y realizar.
Desde el momento de la aparición de la crisis muchos profesionales se han visto obligados a reinventarse tras su salida involuntaria de las empresas en las que trabajaban.
Algunos lo han visto como una verdadera oportunidad, adaptándose muy bien a su nueva situación, liberando y desarrollando su instinto empresarial y aventurero.
Para otros ha sido una pesada losa, pues carecían de las herramientas y habilidades innatas para vencer a la frustración y los obstáculos constantes que aparecen al poner en marcha una actividad.
Todos ellos, sin embargo, han tenido que luchar contra la percepción algo negativa que se tiene en este país sobre el emprendedor. Da igual que libros tan imprescindibles como Free Agent Nation de Daniel Pink clamaran de forma tajante la realidad del cambio hacia una economía de emprendedores o freelances.
En USA se admira a los emprendedores, se valora a los profesionales freelance. En España se miran con cierta condescendencia y se asocian a la imagen de un tipo en su casa con un portátil. Las grandes compañías tienen reticencias a contratarlos como proveedores o incluso como directivos.
¿Y tú de quién eres?. La pregunta de siempre, ya lo cantaban los «No me pises que llevo chanclas«).
Quieren encontrar en su pasado o presente alguna empresa conocida que les dé credibilidad. Buscan una estructura y una dimensión que les dé confianza. Porque si no, nada.
Hasta que llega una empresa americana, que sabe lo que es emprender, que los valora, y que apuesta por ellos. Entonces sí, ahora ya sí que me gustan. Pero tienen que venir de fuera para ver el talento. Nadie es profeta en su tierra.
Como el caso de EyeOs, una empresa de Cloud Computing de unos chavales que realmente dieron el salto cuando una multinacional americana puso sus ojos en ellos nombrándoles proveedores. Así lo cuenta uno de sus fundadores, Pau Garcia, a quién os recomiendo escuchar si tenéis la oportunidad. Es todo pasión, frescura y claridad. Joven sí, listo también.
Otra iniciativa muy interesante en este sentido es Barcelona Global, una plataforma ciudadana que tiene como objetivo poner en foco y conectar proyectos emprendedores y el talento de la ciudad. Unir el que inicia con el que ya ha triunfado, impulsar proyectos conectando personas.
Este país tiene que cambiar esa visión rancia y antigua sobre los emprendedores. Cambiarlo de verdad, no sólo de boquilla. Y empezando por enseñar a los jóvenes es una excelente manera de hacerlo. Toda una generación de mentes abiertas que ayuden de una vez a este país a avanzar.
GRACIAS por apoyar nuestro Proyecto, estamos trabajando en ello, desde abajo, desde los más pequeños aún de la sociedad, creemos en la esencia de CREAR.